martes, 21 de abril de 2009

La campiña y sus pobladores



Hace unos meses las autoridades nos conminaban a deleitarnos con las bonanzas de la carne de conejo, plato exquisito donde los haya y uno de los mejores suplentes de las mariscadas navideñas. No sé si la iniciativa cuajó entre los consumidores, pero seguramente más de uno se quedaría sin cenar esta Nochebuena a consecuencia de la escasez de viandas, que es lo que tienen las crisis económicas…
Ya son muchos los meses que no cato unos buenos gazpachos manchegos y va siendo hora de que, llegada la temporada caracolera, compremos un buen ejemplar y nos pongamos finos con la gastronomía del terruño guisada a base de lumbre…, lo malo es que, a día de hoy, este lagomorfo no se encuentra a un precio tan competitivo como el de hace unos meses… ¡Y eso que en los paseos domingueros llenan los campos como si de ababoles se tratasen...! Con sus correteos, esas colas blancas, sus orejas alertas… Mientras hoy me topaba con ellos he pensado que, si hay algún conejo famoso en esto de la LIJ, ese es Perico, el animal del que tantas trastadas nos contó mi admirada Beatrix Potter.
Miss Potter, pese a su naturaleza tímida, infantil, huidiza y acomplejada, de la que se aprovecharon todo tipo de rufianes, ha pasado a la historia de la Literatura Infantil por crear toda una serie de narraciones ilustradas y cuyos protagonistas son los animales que la acompañaban durante sus vacaciones de verano en la campiña inglesa. Todos, desde Perico a Mamá Oca, tienen algo especial que nace de las pinceladas mágicas con las que Beatrix pintaba sus acuarelas que, aunque pueden parecer sencillas, sigo contemplando como si fuera un bobo frente a la exuberante y verde primavera.
Gracias Beatrix.

5 comentarios:

isabel dijo...

Siempre me parecó ñoña, pero alguien el verano pasado me descubrió lo subversivo de sus ilustraciones, desde entonces las miro y las remiro.
Qué ricos los gazpachos, también los descubrí el verano pasado en tierras manchegas... no solo de lechazo vive el hombre.

Rosa dijo...

Ufff. Yo no puedo con Beatrix Potter, la verdad. Me empalaga muchísimo. Reconozco su preciosismo, pero sus historias me superan un poco. Hace unos años salió un cómic titulado "Historia de una rata mala". Era la historia de una adolescente que huía de casa y en su camino iba trazando un paralelismo con Beatrix Potter. Era una buena idea, en principio, pero el cómic era malo, malo... Así que tampoco logró reconciliarme con esta autora. La película de Renée Zellwegger tampoco me ayudó demasiado...

Román Belmonte dijo...

Ja,ja... Por lo menos no te deja indiferente: eso es lo bueno. Gracias a tí también, Rosa, me has hecho reír con tu sinceridad aplastante. Un saludo.

Mónica dijo...

Para detenerse y observar los detalles, vi la película hace poco y me pareció una mujer con carácter, nada noña, pues dedicarse a los dibujos infantiles no era algo normal en una mujer de su época. Gracias por este post.

miriabad dijo...

Hola Román,
estoy leyendo el libro de Alison Lurie de 'no se lo cuentes a los mayores' y me ha gustado mucho lo que dice de Beatrix Potter. Cuando lees el libro del conejo Perico, la moraleja no te cala, porque lo que de verdad te parece divertido es todo lo que hace Perico. Había leído alguna crítica en libro de ensayo sobre la obra de Potter diciendo que no dejaba de ser moralizante, y eso no me terminaba de encajar con lo que yo sentía al leerlo. Lurie lo ha descrito perfectamente. Por cierto, gracias de nuevo por la recomendación de Lurie. Todas las mañanas voy en el metro lee que te lee. Un saludito, Miriam