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miércoles, 9 de junio de 2021

Selección de Boardbooks 2020-2021 (Segunda parte)


Aunque este junio tampoco abre sus puertas la Feria del Libro de Madrid, el mayor escaparate y punto de venta editorial de nuestro país (dicen que volverá en septiembre de este año…, veremos…), un servidor sigue fiel a la cita con sus selecciones de formato y publica las segundas partes. Hoy es el turno de los libros de cartón (también llamados “boardbooks” o “toddler books” en este mundillo tan anglosajón) para darle un poco de visibilidad a estos libros para prelectores y primeros lectores (entre 0 y 4 años de edad).
Como no son tan abundantes como los álbumes convencionales y no se les da tanto bombo en las librerías, invito a padres primerizos, trabajadores de los jardines de infancia, guarderías y educación infantil, a hacer click en los siguientes enlaces y consultar la primera parte de la de este curso, las selecciones del 2019-2020 (parte 1 y parte 2), 2018-2019, 2017-2018, 2016-2017 y la del 2015-2016, para ofrecer alternativas de lectura a las criaturas.
Antes de empezar con los títulos ordenados por orden alfabético (apellido del primer autor), un puñado de consideraciones:
- Como la mayor parte de estos libros suelen ser híbridos entre las categorías de ficción y no ficción, no considero oportuno darle relevancia a dicha división
- Como siempre, señalo aquellos que me han encantado con mis tres estrellas.
- En esta ocasión he incluido un par de títulos que, aunque no se adscriben al formato puro del libro de cartón, son lecturas dirigidas a los prelectores.
- Aunque intento no dejarme ninguno en el tintero, siempre puede haber olvidos, así que no duden en apuntármelo en los comentarios o enviármelo (llamada a editoriales).
- Si ven algún título de esta lista en rojo, hagan CLICK sobre él, les enviará al vídeo que he preparado sobre ese libro en el instagram de los monstruos.
Sin mucho más que decir, ¡he aquí esta segunda parte de la selección 2020-2021 de libros de cartón!


Albertine. Serafina. El cumpleaños. Libros del Zorro Rojo. (***) Damos el pistoletazo de salida con un libro de gran formato. Sin más palabras que las del título (y alguna pancarta), la última Premio Andersen de ilustración nos invita a sumergirnos en el peculiar mundo de Serafina y compañía durante el día de su cumpleaños. Amigos para parar un tren, fiesta, adornos y tarta se despliegan en unas páginas a rebosar de detalles que descubrir y de paso, dar rienda suelta a la imaginación.



Virginia Álvarez. Quiero teta. Thule. Simpático y colorista, este pequeño libro de cartón aborda el tema de la lactancia materna desde el prisma de los propios lactantes, unos bebés que, con mucho humor, se empeñan en mamar de la teta y prescindir del manido biberón. Habrá que preguntarle a las madres que son la otra parte contratante…



Anna Aparicio Catalá. El abecedario travieso. TakaTuka. (***) Aunque puede parecer un abecedario al uso en el que cada doble página nos presenta una letra del abecedario acompañadas de figuras cuya denominación empieza por la citada letra, este libro también nos invita a jugar y aprender. Por un lado hay que averiguar el objeto intruso que no empieza por la letra representada y por otro, amplia el vocabulario del lector, así como presenta las letras en braille y código morse. Me encanta.


Amaia Arrazola. Animales fantásticos. Flamboyant. (***) He aquí uno de esos libros de pestañas móviles que tanto divierten a los prelectores. Con más de 100 combinaciones posibles, este libro-juego invita a descubrir el lenguaje de animales de sobra conocidos a base de elementos móviles y pequeñas dosis de humor. Con líneas que recuerdan al tatuaje old school y la escuela francesa de ilustración, los colores planos y brillantes de estas ilustraciones captan la atención del lector y dan para recrearse de lo lindo.




Mar Benegas y Alberto Albarrán. Cosas que parecen cosas. Combel. (***) Troqueles, imágenes luminosas y de líneas sencillas, adivinanzas en forma de verso… este libro tiene todos los ingredientes para dejar embobados a los pequeños lectores. Magia entre las manos para descubrir que las formas no son lo que parecen. Con tan solo el pasar las páginas y una voz que acompañe el viaje, puede llegar a ser el mejor sustituto de nanas y canciones.


Ross Collins. ¡Hay un oso en mi silla! Dr Buk. ¿Qué harías si llegarás a tu casa y encontrarás a un oso apalancado en tu silla favorita? Lo primero te cabrearías como una mona, y lo segundo, cualquier cosa por hacer que levante el culo de ella. Precisamente esto es lo que pasa con el ratón que protagoniza este libro con mucho humor y situaciones un tanto locas, que al final termina con un toma y daca.


Marta Comín. Bienvenida. A buen paso. (***) No podía existir mejor título para un libro como este. En él, la dulce prosa, las figuras que se esconden en sus páginas y los colores pastel, dan la bienvenida al mundo a cualquier bebé. Mientras despliegas los animales que saludan al prelector no puedes dejar de esbozar una sonrisa. Tierno, delicado e interactivo a partes iguales.



Marta Comín. Flip, flap, ¡DISFRAZ! Combel. Como la Comín está que se sale, aquí otro de sus títulos más recientes. Si en el anterior transforma las páginas en animales, en este juega a los disfraces desplegando solapas. Robots, calaveras, cerditas y reyes. Una forma bien simpática para que Ernesto y todo el que está invitado a su fiesta, de rienda suelta a su ingenio y creatividad.



Patricia Geis. Ulises / Moby Dick. Combel. (***) Es cierto que estos libros están hechos de gomaespuma y plástico, pero como merecían un hueco en esta casa de monstruos, no he podido evitar meterlos con calzador en esta selección, sobre todo porque me maravilla cómo se han sintetizado dos obras maestras de la literatura tan complejas, incluso para el lector adulto. Apenas unas páginas, oraciones sencillas e ilustraciones de formas y colores planos son los acompañantes perfectos a la orilla del mar o chapoteando en la bañera.




Véronique Juffre. Animales en movimiento. Pípala. (***) Verbos como trepar, descender, agazaparse o erguirse se entienden mejor cuando los relacionamos con animales que suelen realizar estas acciones. Es lo que hace este álbum informativo que además nos presenta un buen puñado de animales exóticos. Las ilustraciones, una maravilla del diseño. Agotado en un abrir y cerrar de ojos, esperemos que lo reimpriman pronto…


Emmanuel Lecaye y Marc Majewski. Palabras pintadas. Libros del Zorro Rojo. (***) Continuamos con otro diccionario de verbos que alejándose del realismo, echa mano de ilustraciones con cierto surrealismo. Cargadas de simbolismo y contraste, son una invitación al optimismo y la fantasía como pocas. Ideal para regalar a lectores intensos y de mente volandera, que al fin y al cabo, es  la mejor forma de mirar lo que nos rodea.


Eva Montanari. Un día en la playa. Juventud (***).  Regresan este par de cocodrilos para traernos las mejores experiencias a la orilla del mar. Los sonidos de las olas, los peces, los cangrejos  o la arena se arremolinan en torno a un niño que descubre lo que le rodea acompañado por su padre. Un historia de aprendizaje que con buen humor y muchas onomatopeyas se puede convertir en una estupenda lectura veraniega.


Angels Navarro y Teresa Bellón. ¡Mira dentro! Combel. Aquí traemos otra propuesta de libro informativo para los más pequeños. Descubrir lo que les rodea levantando y bajando solapas siempre es un mecanismo agradable. Así quedan al descubierto montones de objetos que los prelectores pueden conocer y nombrar. Ideal para guarderías y jardines de infancia donde los críos aprenderán a base de ilustraciones simpáticas la vida cotidiana.



Elena Odriozola. El huevito. Ediciones Modernas El Embudo. (***) Con un formato novedoso, la Premio Nacional de Ilustración da una vuelta de tuerca a una canción que todos hemos entonado cuando éramos pequeños para disfrute de los productos avícolas y las cosquillas juguetonas. Merece la pena detenerse en la caracterización de los cinco personajes que se van desplegando ante nosotros y reencontrarnos con esa patria común que es la infancia. Y el que no lo haya hecho todavía, ¡está tardando!



Estrella Ortiz y Nuria Gallardo. Sol solito / Tres ovejas / Luna lunera. Libre Albedrío (***) Continuando con la estela que abría Cinco lobitos, esta primavera se publican otros tres títulos que beben de la tradición oral. Tres coplillas que, acompañadas de las creaciones minimalistas y simbólicas realizadas en tela por Nuria Gallardo, regresan a las estanterías para que no se olviden entre los devaneos del tiempo y las modas.


Verónica Prieto y Scarlet Narciso. En la verde colina. Ekaré. (***) En la verde colina había una gallina. ¿Qué había en la colina? Una gallina. También un pavo, un pato, un gato y una rana... Pero... ¿qué hacían allí? Para descubrirlo tendrás que pasar las páginas y repetir esta historia de fórmula hasta llegar al final y ponerte a disfrutar con todos ellos. Animadas y con trazo agradable, no se pierdan unas ilustraciones que también cuentan mucho.


Cèdric Ramadier y Vincent Bourgeau. El libro que tiene pupa. Lóguez (***) Como todos sus antecesores, léase El libro que duerme o El libro enfadado, las páginas de este libro miran al pequeño lector e interaccionan con él de igual a igual. Empáticos y curiosos seguro que lo entenderán y buscarán una solución a los males que afligen a este pobre libro. Quizá le tengan que preguntar a alguna madre, ellas son expertas en consolar...


Sabina Schürmann. Zim zam. Pípala. Una pequeña abeja va descubriendo en su libar un fruto, la hierba del campo o una piedra. El camino hasta la luna puede ser una estupenda antesala para una canción de buenas noches. Ilustraciones agradables y tranquilas, y un texto donde la onomatopeya acompaña al sueño son las piedras angulares de un libro dulce como la miel… Zim… zim… zam… zam…



Frèdéric Stehr. ¡Chin Bam Bum! / El día del abrazo. Kalandraka. En un jardín de infancia cuatro polluelos lían la marimorena con cualquier idea que se les ocurre. Tan pronto montan una orquesta, como no paran de abrazar a sus peluches. Dos álbumes que cogen de la mano al lector y lo invitan a disfrutar de historias tiernas y cotidianas con las que no se debe olvidar que juntos, somos mejores.


Anna-Clara Tidholm. ¡Toc, toc! Océano Travesía. (***) Por último aquí les traigo una propuesta estupenda que aúna el descubrimiento y los conocimientos. Páginas que son puertas (o mejor dicho, puertas que son páginas). Cada una de un color. Nos invitan a llamar. Las abrimos y encontramos escenas fantásticas que, además de contar e imaginar, nos invitan a soñar. ¡Buenas noches a todos!


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