Como decíamos ayer, hoy toca uno de esas entradas que gastan
a muchos, no sólo por el carácter generalista que tiene, sino porque me consta
que muchos de ustedes sienten verdadera pasión por esos álbumes que se
perpetúan con nuevas aventuras, con episodios protagonizados por los mismos
personales, los llamados álbumes-serie.
Seguramente la denominación les sonará a chino (¡Qué cosas
dice este Román!), pero creo no errar cuando afirmo que la mayor parte de
ustedes, monstruos, han tenido en sus manos uno de estos libros, pues muchos de
ellos son de sobra conocidos y leídos, no sólo por cada generación de pequeños
lectores, sino por toda la genealogía familiar.
Creo que iba siendo hora de detenerse un poco en este tipo
de álbumes que tanto dan que hablar, no sólo por esa vis comercial, sino por reunir
facetas sobre las que caben preguntas y respuestas. Hace unos años, a tenor de
la secuela de un álbum con cierto éxito de ventas, se me ocurrió detenerme en
este fenómeno –AQUÍ tienen el enlace-, pero lo cierto es que muchas de estas
creaciones pasan desapercibidas al ojo crítico (y clínico) de muchos estudiosos
y enteraos (N.B.: Prueba de ello es que hay muy pocos artículos académicos que
se refieran a esta realidad. Les aseguro que he buscado sin mucho éxito. Excepto este número de la revista Fuera de margen, dedicado a estas producciones, las referencias a este concepto son escasas), y es
por ello que un servidor, desde su humilde mirada, ha decidido dedicarles un monográfico
de andar por casa.
La primera cuestión es la de ¿qué es un álbum-serie? Por lo
general, un álbum-serie se refiere a un conjunto de libros, casi siempre de ficción,
protagonizados por los mismos personajes y que nos presentan diferentes
episodios en cada volumen pero que se relacionan de algún modo.
Llegados a este punto cabría hacerse otras preguntas: ¿Es lo
mismo una trilogía que una serie? ¿Es lo mismo una serie que una saga? Generalmente
las sagas y las trilogías se diferencian de las series en que las partes o
volúmenes que las configuran tienen una mayor cohesión, pues no sólo
personajes, sino también hilo argumental tiene cierta continuidad. La saga se dilata
más en el tiempo, se refiere más al concepto de epopeya -sobre todo familiar- y
posibilita una mayor ramificación y diferenciación de las partes. La tri-tetra-penta-(n)-logía
se podría considerar desde un prisma temporal más acotado y una única pieza
creativa donde las partes son necesarias para el todo (o no). Como estas se pueden
confundir con la series sucesivas, de las que hablaré a continuación, sería
conveniente limitarse a sagas y series.
¿Podríamos considerar la trilogía del límite de Suzy Lee o la trilogía de los sombreros de Jon Klassen álbumes-serie?
Sobre las series decir que se suelen distinguir dos tipos,
las sucesivas y las seriales. De las sucesivas podríamos hacer un símil con las
series de televisión: una historia contada por capítulos de los que podemos
extraer dos ideas, una referida a ese capítulo, y otra más general referida a
la serie. Sobre las seriales decir que, aunque cada capítulo comparte un nexo
común, pueden ser independientes y expresar una idea que no necesariamente debe
relacionarse con otra más global.
Las series en literatura, y más concretamente en la referida
a los niños y jóvenes, es un formato que ha sido muy explotado desde que la LIJ
es LIJ, y tenemos multitud de ejemplos, sobre todo en narrativa de ficción
juvenil y en todo lo que atañe al cómic infantil y juvenil de aventuras, un
universo que bebe con frecuencia de esta estructuración al estar enmarcado en
el contexto del “coleccionismo”, algo que, aunque también se observa en la
novela gráfica, parece que comienza a dejarse de lado durante los últimos
tiempos.
Noddy. Enyd Blyton y Beek.
En el género del libro-álbum hay que decir que la mayor
parte de estas series se refieren a la última categoría, pues el objeto-libro también
facilita esa diferenciación espacio-temporal por parte del lector, y los
autores suelen recurrir a las aventuras, situaciones o acontecimientos
aislados.
Otro punto que me llama mucho la atención de los
álbumes-serie es su proceso creativo. ¿El autor tenía claros los objetivos de
una serie a priori o sin embargo es una decisión editorial y/o comercial? La
gran mayoría de los álbumes-serie que conozco han nacido al amparo de un éxito de
ventas. Por lo general, es el primer libro el que triunfa entre el público y a
este le suceden una serie de secuelas que presentan nuevas situaciones,
referencias e incluso personajes que van enriqueciendo la acción en las
sucesivas entregas (Abro aquí un paréntesis para apuntar al mundo anglosajón,
pues es donde más ejemplos de este tipo de libros encontramos dado el gran volumen
de negocio existente). Esta realidad favorece que muchos especialistas resten
credibilidad literaria a este tipo de creaciones, pues cumplen con varias
premisas a la hora de encuadrarlos en la categoría de paraliteratura, una en la
que diseño, formato y estructura hablan bastante de las artimañas editoriales.
Son pocos los álbumes-serie que nazcan desde el ejercicio
creativo, desde el capricho personal, pero tengo claro que los que se crean de
este modo tienen una vis literaria mucho mayor y en ellos podemos encontrar
historias de similar calidad en todas sus entregas. Sin embargo, las orientadas
por las editoriales tienden a desinflarse conforme vamos avanzando en los
diferentes volúmenes.
Pero, ¿qué lleva al lector a pedir más historias de los mismos
personajes, a necesitar del mismo universo ficcional una y otra vez? En la
mayor parte de los casos, todas estas series tienen cierta vis cómica, beben de
las historietas de situación y son personajes muy bien planteados desde los que
puede extenderse lo fantásticos y lo paródico, es decir, son fácilmente
enriquecidos por nuevos planteamientos o personajes secundarios que entran en
el juego para ofrecer continuidad. Existe una cercanía con ese
lector-espectador que se identifica con ellos y su día a día, y establecen una
relación (¿podría llamarse amistad?) que se ve aupada por el carácter
posmoderno de la imagen, en la que también entran en juego otras narrativas
gráficas, el ecosistema televisivo y cinematográfico, así como la repetitividad.
Cabe también hacerse la pregunta sobre la categoría de “no
ficción” en el álbum-serie. ¿Se pueden encontrar? Por supuesto. En muchos casos
el libro informativo, sobre todo el referido a prelectores y primeros lectores,
hace uso de personajes que adentran al niño en conocimientos y costumbres cotidianas.
También podemos encontrar libros de conocimientos que guardan una estética,
formato, e incluso escenario similar, algo que también puede tomarse como
ejemplo de producciones literarias seriadas tomando como base el objeto libro.
Los álbumes-serie son cada vez más típicos en nuestras
bibliotecas y librerías. Casi cualquier obra que tiene cierta aceptación entre
el público tiene sus secuelas. Una, dos, tres o decenas, que por un lado fidelizan al lector a un producto
(estrategias comerciales) y por otro amplían unas ideas o conocimientos (parte
más literaria). Sería imposible reunir en esta entrada todos los álbumes en
formato serie que se han editado entre los siglos XX y XXI, periodo en el que
más han proliferado estos productos, es por ello que hoy solo me centro en
aquellos clásicos (si se fijan denotarán que hay bastantes, ¿será por algo?), algunos ejemplos más actuales, y siempre en la categoría de ficción, que
están editados en castellano o que todavía no lo están.
Esperando que les gusten tanto como a mí y que me hagan saber si falta alguno de mención, me despido hasta otro día menos seriado.
LOS DE SIEMPRE
Babar. Jean de Brunhoff
Harold y el pápiz morado. Crockett Johnson.
Osito. Else Holmehund Minarik y Maurice Sendak
Ernesto y Celestina. Gabrielle Vincent.
Sapo y Sepo. Arnold Lobel.
El viaje de Anno. Mitsumasa Anno.
El seto de las zarzas. Jill Barklem.
Madeline. Ludwig Bemelmans
Pomelo. Ramona Badescu y Benjamin Chaud.
Oso y Tigre. Janosch.
Topolín. Janosch.
Sapo. Max Velthuijs
Elmer. David McKee.
Willy. Anthony Browne.
Olivia. Ian Falconer
Jorge el curioso. H. A. Rey.
Findus y Pettson. Sven Nordqvist.
OTROS ÁLBUMES-SERIE
El pequeño rey. Javier Sáez Castán.
La casa de los ratones. Karina Schampamn.
Max. Ed Vere.
Imagina. Aaron Becker.
Poka y Mina. Kitty Crowther.
Oso y su hijo. Benjamin Chaud.
Triángulo, Cuadrado y Redondo. Mac Barnett y Jon Klassen.
Antonino. Juan Arjona y Lluïsot.
Gaston y Antoinette. Kelly DiPucchio y Christian Robinson.
Garmann. Stian Hole.
La ballena. Benji
Davies
Soy el más... Mario Ramos.
Zuza. Anaïs Vaugelade.
Los Quichon. Anaïs Vaugelade.
El ratón que... Petr Horacek.
Pete el gato. Eric Litwin y James Dean. Lata de Sal.
El ratón que... Petr Horacek.
Pete el gato. Eric Litwin y James Dean. Lata de Sal.
Fox + Chick. Sergio Ruzzier
La paloma. Mo Willems.
Elephant & Piggie. Mo Willems.
Oso. Cliff Wright.
Panda. Steve Antony
Charlie y Ratón. Laurel Snyder y Emily Hughes.
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