“¡Bienvenidos a la fiesta del colesterol y el ácido úrico!” claman todos los anuncios navideños, mientras la gota y la aterosclerosis se frotan las manos. Los profesionales de los atracones andamos equilibrando los excesos con algo de ejercicio, fruta y verdura, de tal manera que las cenas y comidas no hagan muchos estragos.
Chuletones, cordero asado, mantecados, vino y cerveza, jamón y embutidos ibéricos... Menos mal que el marisco y sus derivados están a precio de oro y no vamos a poder concedernos demasiados lujos estas fiestas. Si acaso, chupar alguna cabeza, que ya es bastante.
Y quién no tenga ni siquiera para eso se tendrá que conformar con las rimas de hoy, una pequeña aventura que nos cuenta la cabra chismosa que protagoniza este libro por el que transitan historias disparatadas de animales como el oso polar, el ciempiés, el orangután o la sardina que se presentan en diferentes formatos que abarcan desde la poesía al cómic. ¡Disfrútenlo!
¿Pero qué alegría es esta?
Es que va a haber una fiesta.
-¡Vámonos al restaurante!
Anuncia el bogavante.
Enseguida, el langostino
busca su traje de lino.
El mejillón, más tranquilo,
usa su camisa de hilo.
Con sus diez patas, la gamba
quiere bailar una samba.
Al pulpo y al calamar
les apetece cantar
¡Vaya fiesta glamurosa!
Además hay salsa rosa.
¿Salsa? ¿Rosa? ¿Salsa rosa?
Que alguien aclare la cosa.
Mal asunto, adivina,
la fiesta es en la cocina.
Alguien dice: “Vaya cisco!
¡Es un cóctel de marisco!”.
Todos se dan a la fuga,
solo queda la lechuga.
Rafa Ordóñez.
¿Pero qué fiesta es esta?
En: Palabra de cabra.
Ilustraciones de José Fragoso.
2023. Madrid: Loqueleo Santillana.
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